Como cada 17 de agosto, el General Don José Francisco de San Martín y Matorras, Padre de la Patria y Libertador de la Argentina, Chile y Perú; nos convoca.
Es un llamado que une lo mejor del pasado con los desafíos del presente y las esperanzas depositadas en el futuro; nos encontremos lejos o cerca, en cualquier rincón de nuestra geografía tan magnífica como diversa.
Y acá estamos, una vez más, dispuestos a renovar nuestro compromiso inquebrantable con el legado sanmartiniano de una Patria libre, independiente, justa y soberana.
Y cualquiera que tenga por propósito trabajar por una vida digna y en libertad tiene en él al mejor modelo a seguir; porque era un defensor de valores trascendentes a los que supo identificar como “la causa del género humano”, en su condición de “instrumento accidental de la justicia y agente del destino”.
Establecido en Boulogne-sur-Mer en 1848, septuagenario y casi ciego, “la fatiga de la muerte” lo alcanzaría un 17 de agosto de 1850, a las tres de la tarde.
Quedaba para el futuro su legado como referencia del camino recto a transitar por la Argentina en los buenos y malos momentos.
Con la herida que significaba no poder regresar; siguió pensando, sintiendo y amando a su la Argentina, aún a la distancia.
Porque su corazón siempre estuvo siempre con nosotros. Y, a veces, un poco más.
Sabía que un país no era sólo un territorio con instituciones nuevas, sino un compromiso responsable con la dignidad de personas que tienen sueños, esperanzas, preocupaciones y desvelos.
Por eso, ese Padre de la Patria, que supo amar a sus hijos, no vaciló en expresar en las horas más difíciles: “La seguridad de los pueblos a mi mando es el más sagrado de mis deberes”. Fuente Ministerio de Cultura Argentina
Desde la Subsecretaría de Cultura nuestro homenaje:
Infancia de un elegido de Fermín Fierro
Voz Prof.Griselda Paredes
Guitarra Prof.Gogo Figueroa